SER ATLETA
Siempre me gustó el esfuerzo físico, no sé si llegue a conquistar la condición de atleta como consecuencia del devenir de mi propia personalidad, o casualmente, el descubrimiento de ciertas capacidades atléticas la modeló. Lo importante es el resultado final, esa simbiosis entre carácter y escenarios que retroalimentaron esas capacidades, me convirtieron en atleta para siempre, hasta que el sistema complejo de la vida me lo permita, pero no faltará el impulso que todo lo mueve, la fuerza de voluntad y la perseverancia. Pero, ¿qué supone ser atleta?, no voy a recurrir a definiciones establecidas, sobre todo, por personas que no han sido atletas. Evidentemente, ser atleta lleva implícito un aspecto estrictamente mecanicista y fisiológico, es una persona que está en esos percentiles de condición física muy alejados de la mediana, la media o lo normal en la población. Hoy en día, si atendemos exclusivamente a ese parámetro, es fácil adquirir la c